En el Super

Hoy me ha tocado ir a comprar algunas frutas y otras cosas que Juana no había previsto comprar sin saber que mañana vienen a comer los padres de Sara y claro Sara, pero como nunca avisan, como nunca saben que van a hacer en unos días, como tienen la facilidad de a ultima hora decirnos "vamos a comer", ya veis lo sencillo que es, así cualquiera.


Bueno pero lo que yo iba a comentar no era esto precisamente, sino como nos hemos vueltos los humanos ciudadanos de cualquier país evolucionado económicamente y entrado en el sistema de consumo, ahí queda eso, de verdad que hay que digerirlo pausadamente y sin atracandarte, es muy duro.

Bien lo primero, todos vamos a la misma hora, ese momento vayas al departamento que vayas estará lleno y tendrás que esperar un buen rato, ya por fin si has comprado todo rápidamente te vas hacia una de las cajas que estarán llena y tendrás que hacer cola para pagar.

Hoy estaba esperando en una de estas colas para pagar las frutas que Juana me había dicho que comprase para la papilla de Sara de mañana domingo, bien, llega una señora y a mi altura, (antes de mí había unas cinco o seis personas esperando pagar) dice <¡¡jo!! Para solo esta barra de pan lo que voy a tener que esperar>, ante esa injusticia yo no puedo ser imparcial y tuve que responder, le dije, suavemente, casi diría yo cariñosamente, "pues señora porque no la compra usted en la panaderia que habra al lado de su casa"la señora muy interesada enseguida me coje por banda y me hace la pregunta clave "¿ A usted no le importa pagar tres centimos mas en la panaderia?" ante ese razonamiento me tube que callar...

Tampoco la cosa tiene importancia, pero me gusta decirlo, lo curioso en esos sitios (en los súper multi) es que hay muchos clientes que se lo saben todo y parece que son empleado de la multi, hoy también delante de mi había un señor mas o menos de mi edad (jubilado, ya sabes, especie aparte) y una señora que tubo que usar cuatro bolsas de plástico para su compra, se puso un poco nerviosa porque veía la cola que había y quería tarda lo menos posible, pues ese señor detrás de la señora y delante mía, muy amable le dijo, "tranquila señora, no hay prisa, ya lo tenemos todo hecho", pero el cabrito estaba diciendo estas palabras amables empujándola y empezando a meter sus cosas en bolsas, claro la señora se puso mas nerviosa aún. Hablando de esto las cajeras debían de ser mas cuidadosas y no empezar a cobrar al siguiente cliente hasta que el anterior no haya terminado del todo.

Vivimos demasiado bien, vivimos solo para el consumo y para hacer lo que nos indican en las Publicidades, en los medios de comunicaciones, vivimos para tener mas de lo que tiene nuestro vecino o amigo, vivimos una epoca que no se ve el final, no se ve la razon. Concretamenrte vivimos sin ideales solo para sastifacernos materialmente cada minuto de la existencia, asi nos hemos hecho de egoistas...

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